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lunes, 6 de enero de 2020

RECUERDOS DE REYES





                                       " LOS RECUERDOS BAN CON NOSOTROS "

                                         La fachada blanca er nuestra casa, ahora caida.

                                 ESTA ES LA NOCHE MÁGICA Y SIEMPRE LO SERA

Han pasado muchos años y todavía recuerdo la noche de reyes en Clamosa, la cena al lado del fuego
( nuestra cocina tenia el hogar en el centro) la chimenea la parte superior tenia forma de tubo y la parte de abajo tenia forma de falda de vuelo, el fogaril y las cadieras, una mesa que caía de la pared y
se plegaba al terminar "Como me gustaría tener una foto" en el pueblo esta cocina era única en el resto el hogar estaba pegado a una de las paredes.
En las noches de invierno las veladas al rededor del fuego contando historias y aveces haciendo tareas como escoscar las almendras o trenzar las panochas de maíz, los pequeños en la falda de la
yaya hasta quedar dormidos.
En la noche de Reyes  era mucha la ilusión siempre pensando en que cosas nos traerían los Reyes, después de cenar era hora de ir a la cama,antes poníamos la cestita como era costumbre pero lo de dormir era otra cosa no queríamos dormir hasta que al final caíamos dormidos.
Nosotros eramos cinco hermanos la economía no estaba muy bollante, las tiendas a cinco horas de camino, por esas fechas algún viaje se hacia y aprovechaban para hacerse con algun capricho,madrugábamos para ver lo que había caído que mas o menos era lo mismo cada año.
Los Reyes siempre dejaban caramelos, turrón de guirlache, castañas, mandarinas, cosas que no teníamos durante el año. Al año siguiente teníamos de nuevo la misma ilusión es como si fuéramos conscientes del de la buena voluntad y el cariño que había  en casa.
Los niños de hoy tienen ilusión pero dura poco, cuando tienen algo enseguida se cansan y ya están pidiendo otra cosa, tienen tantas cosas que al final no lo valoran y creo que valoran mas que juguemos con ellos.
Nunca tuve una muñeca, no teníamos juguetes pero teníamos hermanos para jugar y unos abuelos
que cuidaban de nosotros.
                            QUE NUNCA DEJEMOS ESE NIÑO QUE LLEBAMOS DENTRO

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