CLAMOSA FUE EXPROPIADA
¿Hubiera llegado el Coronavirus a Clamosa?
Con el confinamiento hemos tenido tiempo para pensar en el pasado y también en el futuro, hacer un repaso de todo lo que hemos vivido a lo largo de nuestra vida empezando por el pueblo de mi infancia que fue Clamosa. Una familia grande padres abuelos y hermanos, tierras para cultivar y conseguir los alimentos necesarios para nuestro día a día y una casa muy grande donde vivir, guardar los alimentos, había espacio para todo.
El cultivo de las tierras se hacía con caballerías o manual, el agua se traía de la fuente, el forraje la hierba y el trigo se cosechaba con la hoz y la dalla, se llevaba a la era para trillar y llevar el grano a casa toda la familia arrimaba el hombro cada uno según las fuerzas, las tareas del verano con el cuidado de los huertos y en invierno la recolección de las olivas que eran importantes en la economía familiar, el aceite servía para cubrir necesidades como ropa y calzado, en alimentación habían pocas necesidades, azúcar arroz y poco más. Las carnes, legumbres verduras, huevos, se hacían en casa.
No recuerdo la fecha pero bastante ante de producirse la expropiación llegaron los rumores que luego se hicieron realidad, ya no se hacían mejoras en las casas y solo se arreglaban las goteras.
Ahora esto seria calidad de vida, sin prisa sin ruido pero no hay nada perfecto. Nos faltaría el coche para desplazarnos el agua corriente y muchas más cosas, estaría bien para pasar un confinamiento, me pregunto si el virus hubiera llegado a Clamosa.
Tras muchos años en la ciudad, ha cambiado mucho la forma de vida en nuestros pueblos, los que han aguantado, pues los que no fueron expropiados terminaron abandonados, sus habitantes emigraron a pueblos más grandes o ciudades en busca de una vida mejor.
Aquello si que era economía sostenible, producir casi todo lo que se consumía, no había horarios de trabajo eso suena muy bonito pero la realidad era un poco diferente porque la mayoría vivía de la tierra y entonces no había maquinaria todo se hacía manual trabajo duro para vivir sin lujos ni comodidades.
En estos días de pandemia los que vivimos en la ciudad ha sido duro, no nos ha faltado nada pero
yo almenos, he sentido un riesgo muy grande de contagio y peor todavía cuando dijeron que podíamos pasear," nunca vi tanta gente en la calle" así que yo tuve miedo de contagio y seguí saliendo solo a comprar estaba cómoda en casa pero cuando pasa un tiempo la sensación de encierro, es como si estuvieras en una jaula, todo ha ido mejorando y este fin de semana hemos salido estuvimos en la playa en Cubelles algunos llevaban mascarilla, obligatoria para entrar en las tiendas, en la ciudad obligatoria para todo.
Solo los que han cumplido más de cien han visto algo parecido algunos podemos contarlo.
NO SE HA TERMINADO PERO LO SUPERAREMOS.
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